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MEDITANDO ANDO


Empecemos por la respiración… Me he dado cuenta al observar a los que están a mi alrededor y a mi misma, que respiramos como si no fuera gratis y nos fueran a llegar impuestos por hacerlo… Por suerte todavía no tenemos impuesto al aire y si estas en tu casa limpia, iluminada y sin covid puedes hacerlo con naturalidad y confianza. 



Noto que al respirar en vez de expandir nuestro hermoso ser, estripamos todo sin dejar espacio para que al aire entre y nos recorra. Afortunadamente encontré una forma de respirar, luego muchas más, siendo cada vez más consciente sentí como se prendia la luz, literalmente cuando hago un ejercicio de respiración en el consultorio con alguno de mis compañeros de viaje (usuarios, clientes, pacientes o como lo quieras llamar) resulta que al abrir los ojos percibo que la habitación está más iluminada, puede ser sugestión, lo se… pero se siente bien y no le hace daño a nadie. 


Sigamos con la conciencia… cuántos de los que están leyendo esto pueden diferenciar un dolor de cabeza causado por tensión, cansancio, ojos agotados o cualquier otra causa???, cuando se los pregunto a estos viajeros intrépidos que han entrado a mi consulta la respuesta más habitual es un no! junto a una mirada de “hmmm estas loca”; sin embargo encuentro también quien conoce tanto su ser y tiene tanta conciencia de sí mismo que puede entender que cierta actividad agendada para hoy debe ser reprogramada para otro día evitando un posible caos… obvio no todo se puede mover! pero si tengo una salida a caminar en el bosque y pase mala noche puedo terminar en el borde de la carretera con la presión baja, o de conocerme un poco y permitirme actuar en consecuencia y cambiar el plan por día de lectura en cama.


LA MEDITACIÓN para mi es la unión de Respiración y Conciencia… así de simple, así de complejo. Estar 3 minutos sentada derecha y respirar, atenta a cómo el aire entra y sale es posible, de hecho sencillo y los beneficios son inmediatos. 

Saldrías de tu casa en chanclas y sin sombrilla al ver desde tu ventana que cae un diluvio torrencial?? Seguro que no… Asi que mi invitación de hoy es tomate 3 minutos respira y verás que la lluvia torrencial de tus pensamientos no caerá tan fuerte sobre tu cabeza. 

Info complementaria: 

Empecé a meditar hace muchos años en la universidad (no lo hago todos los días porque tengo menos disciplina que un resorte), cuando conocí la Psicología Transpersonal, entre prácticas, lecturas y charlas encontré una parte de mi que antes no encajaba en ningún lugar y empecé a aprender de espiritualidad hasta encontrar piezas que fuesen útiles para mi y dejar las demás a un lado sin criticar ni destruir; más adelante en Argentina estudié Psicología Transpersonal y Salud Mental y Espiritualidad, abriendo mi cabeza de maneras fantásticas y sacando la mas linda conclusión TODOS QUEREMOS SER FELICES. 



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